La acción tiene lugar en el Alto del Perdón, a pocos km de Pamplona.
Un peregrino llega a la cumbre agotado por la sed. El diablo, disfrazado de caminante, se ofrece a indicarle una fuente oculta, a condición de que reniegue de Dios, de la Virgen o de Santiago. Pero el peregrino mantiene su fe a toda costa aún cuando se encuentra exhausto. Es entonces cuando se aparece Santiago vestido de peregrino, recoge al moribundo y le lleva a la escondida fuente, dándole de beber con su vieira.